Space Funeral - Especial RPG Maker

Paso a paso nos vamos adentrando en la oscuridad. En la entrada de Ib disfrutábamos de la luz solar, y con OFF empezamos a adentrarnos en la cueva de lo extraño. Space Funeral se sitúa justo en medio del camino, donde aún hay vuelta atrás, pues seguimos vislumbrando pequeños haces de luz que proceden de la pequeña obertura por la que entramos. Este es el momento donde nos debatiremos si estamos realmente preparados para avanzar hacia lo desconocido, más allá de la lógica y la razón, o si por el contrario nos falta valentía para entrar más y más en las garras de lo desconocido.

Space Funeral fue creado hace dos años por alguien apodado thecatamites, y es un juego para RPG Maker 2003. De entre todas las obras diseñadas por su autor, Space Funeral es la más famosa, convirtiéndose incluso en uno de los juegos para RPG Maker más conocidos de la plataforma. Poco a poco se ha ido abriendo camino entre los juegos más trabajados por su originalidad, hasta el punto de tener una pequeña entrada en blogs tan conocidos como Rock, Paper, Shotgun. El resto de juegos creados por thecatamites también son bastante perturbadores, rompiendo todas las reglas posibles y entrando por la fuerza en el sector de juegos indies creados con RPG Maker. Quizás un día hablemos más en profundidad de su autor y del resto de juegos, dedicándole una pequeña entrada nombrando y comentando todos sus trabajos, pero de momento sigamos con su obra insigne.

Antes de empezar a analizar el juego por separado y en su conjunto, me gustaría hacer un pequeño recordatorio de lo ya escrito en la entrada de Ib, cuando comentaba el carácter de este evento y a su vez aclaraba un punto bastante importante: Que un juego sea raro no significa que sea mejor o peor, no tiene nada que ver, y Space Funeral es un ejemplo bastante claro de ello. Objetivamente, se trata de, quizás, el segundo peor juego de los cinco totales, pero eso no quita que merezca una decente tercera posición si los comparamos según su carácter bizarro y experimental.

Sí, lo de en medio es nuestro protagonista.

El argumento que nos presenta Space Funeral es, en términos generales, bastante simple. Phi`llip se despierta un día y decide empezar a vivir aventuras, dirigiéndose al norte, hacia BLOOD CAVERN, un lugar muy peligroso donde vive un mago-vampiro-vidente que le indicará el camino a nuestro protagonista. En un principio no parece ser un argumento demasiado complejo: Visitar un oráculo y viajar hasta nuestro destino, muy simple. Pero lo que hace extraño a Space Funeral no es precisamente su historia, sino su entorno.

Para empezar, el mundo que nos rodea es un boceto mal dibujado de un ecosistema malvado, bizarro y gore; los NPCs son personajes extraños que nos ayudan a orientarnos y a recordarnos lo peligroso que es todo lo que nos rodea; nuestro protagonista es un hombre calvo en pijama que no para de llorar, y por si fuera poco, nuestro compañero de aventuras es alguien llamado Leg Horse, un caballo sin cabeza que nos acompañará en nuestra misión.

El gameplay es muy parecido al que veíamos en OFF, combates por turnos en tiempo real, pero sin encuentros aleatorios. Al salir de nuestro pueblo y adentrarnos en la espesura, veremos pequeños NPCs correteando por ahí, y que al tocarlos, nos harán entrar en el modo batalla, tan cutre como el resto del juego, sin fondo y con personajes dibujados al más puro estilo paint. Poco a poco iremos despachando a los enemigos y avanzando hacia nuestro destino, pero sin sudar demasiado, porque la dificultad del juego es muy poca o nula. No importa las veces que nos recuerden los NPCs lo peligroso que es adentrarse más allá de lo conocido, porque en ningún momento tendremos problemas con los combates.

Nos dejan guardar siempre y en todas partes, y os aconsejo que lo hagáis a menudo, porque si de alguna forma puede peligrar nuestra vida, será esquivando unas rápidas y peligrosas momias (te empujan al Game Over de un toque, sin necesidad alguna de batalla) y antes de hablar con el mago en BLOOD CAVERN. Id guardando por precaución, porque al tratarse de un juego tan fácil, uno se olvida de guardar y darse de bruces contra un Game Over cuando llevas 10 o 15 minutos jugados no es muy agradable. También os aconsejo ir a la derecha del pueblo natal a investigar la zona, más por ir totalmente relajados en las batallas que por otra cosa.

Combates trabajados como ellos solos.

Hay tiendas, para comprar equipo y objetos de curación, así como Skills para hacer frente a los enemigos, pero pocas veces usamos todo ello en combates, pues teniendo un poco de cuidado y con simples ataques normales, todos los enemigos son fácilmente vencibles.

A simple vista y por el momento, lo que tenemos delante de nuestros ojos es un juego cutre y hecho por alguien que valientemente ha aplicado la regla del sinsentido al crear su obra... La regla de romper todas las normas posibles en un RPG. Unos gráficos cutres, una historia simple y una dificultad nula, aspectos poco elaborados (¿intencionadamente?) que contrastan radicalmente con la música, que con gran maestría nos sumergen en el bizarrismo propio de Space Funeral.

No podríamos hablar de música propia del juego, porque no ha sido creada por el mismo autor, pero sí de un genial remix de canciones exageradamente bien escogidas para el juego, y que con una maestría asombrosa varían de canciones pegadizas a piezas tan oscuras que incluso nos harán temer y recordar ciertos momentos del juego. Un ejemplo de canciones pegadizas y alegres podrían ser el tema que se puede escuchar en los combates, One Eighty One y la que suena en los campos, Colour Radio, ambos creados por BBC Radiophonic Workshop; el tema del pueblo natal de Phillip, White Waking, de Les Rallizes Denudes; las increíbles narraciones de Ruth White, de su disco, The Flowers of Evil, que sin duda nos hará temblar de miedo en la BLOOD CAVERN; y la genial pieza que suena en el Game Over, que casualmente es la misma que cuando ganamos una batalla, 7 and 7 Is, creada por Love.

Todas las canciones del juego merecen la pena, y como mínimo nos harán descubrir grabaciones tan curiosas y macabras como las de Ruth White o canciones como White Waking, para mí la mejor pieza musical del juego. Una banda sonora que se establece como una de las razones principales para jugarlo, junto con el componente bizarro del mismo.

A diferencia de lo ya visto en las anteriores entradas, donde la duración era mediana o larga, Space Funeral es muy, muy cortito, y en una hora o menos deberíamos ser capaces de acabarlo. También habrá pequeñas dosis de humor que nos esbozarán una sonrisa y nos harán más ameno el trayecto (no os podéis perder la conversación con Drácula, es genial).

En definitiva es un juego extraño, con un argumento simple y unos gráficos cutres, pero que con una banda sonora excelente y un bizarrismo muy personal, que consigue superar con creces los mínimos jugables básicos y se convierte en una opción altamente plausible para aquellos que buscan un juego extraño y sobretodo diferente, por muy corto y cutre que sea.